martes, 29 de octubre de 2013

Games of Dead




Paco Mcneil era un adolescente de California, los vecinos decían que era un chico rarito, un poco antisocial pero nada grave.

Su pasión eran los videojuegos, tenia de todas clases:

De consolas modernas, juego antiguos, de ordenador etc…

Pero a el los que le Maravillaban más eran los de ordenador cooperativos online.
El jugaba sobre todo por las noches, unas dos horas cuando acababa de cenar y antes de acostarse, era su momento preferido del día, pues se sentía relajado después de un día de instituto, deberes y tareas de casa.

Nuestra historia comienza un lunes cuando Paco se despertó para ir a su instituto, se preparó su mochila fue al aseo y luego a desayunar, en ese mismo instante se percató de que su madre ya se había marchado de casa a trabajar y su padre mas de lo mismo pues ellos era ambos agentes financieros y llevaban su propia empresa, pero acababan de empezar dicho negocio y eran los encargado de abrir y cerrar las persianas como alegremente decía su madre.

Paco se sentó un instante comió un poco de pan con mermelada y tomo un vaso de zumo, seguidamente se levanto de la silla, cogió la mochila y salió de casa, una vez en el porche se fijó, como era de costumbre, en la casa adyacente la cual era idéntica a la suya y al las del resto del barrio pues vivía en una zona residencial maravillosa de casas con dos plantas y garaje, todas muy acogedoras, pero dicha casa del al lado no era igual, llevaba deshabitada muchos años, estaba en malas condiciones:

No había césped como en las demás, las ventanas estaban tapiadas pero la puerta no y eso no le gustaba a sus padres, además la pintura se caía de las paredes dejando la casa con un aspecto horrible en un barrio muy bonito.

 El transcurso del día fue muy normal, insultos, trabajos, tareas, exámenes y demás. Una vez en casa, cuando por fin acabó todos sus deberes y devoró su cena, subió a su cuarto dispuesto a partir piernas en su juego de red favorito, enchufó el pc se conecto al juego y empezó su batalla diaria.

Paco no era buen jugador, pero si que era muy competitivo. Tras media hora de partidas perdidas coincidió con un jugador con el que todo fluía y le empezó a ir bien, se pasó el resto de partidas ganando, le gustó tanto la experiencia de jugar con aquel chico que le agregó para jugar otros días con él y luego se fue a la cama, alegre de haber ganado mas que nunca y pensando en el próximo día.

El siguiente día fue igual, todo pasó muy rápido, el instituto, sus tareas todo le parecía a veces vivirlo en piloto automático, tantos días iguales, además el no tenía amigos pues le costaba socializarse y le dolía ver como otras personas conseguían hacerlo tan fácilmente y el no, eso le hacía pensar que el era diferente, a veces le hacía sentir especial y otra veces raro, pero donde se sentía en total paz era en su casa frente a su pc donde a todos le gustaba lo mismo y lo sentía en mayor o menor medida como el.

Esa misma noche comenzó su ritual, enchufó el pc y una estufa que tenía al lado pues ya hacia frío, y se conectó al juego. Para su sorpresa encontró a su amigo del día anterior conectado y diciéndole de jugar, el se alegró y aceptó la invitación. Partida tras partida y victoria tras victoria el se emocionaba más, pasó el tiempo volando y se le acabo el periodo de juego, pero el decidió quedarse un poco más y conocer a su nuevo amigo.

Hablaron de todo lo que les gustaba y conectaron muy bien tanto que Paco le preguntó que de donde era, a lo que él contesto que era de California, resultó tras su sorpresa que vivía en el mismo estado donde vivía él y tenía un año más que él.

Paco alterado y con ganas de quedar con el, le preguntó su dirección, a lo que el le contestó algo que impactó brutalmente a Paco, resulta que vivía justo en la casa de al lado, la casa abandonada. Paco se asustó mucho pero pensó que le estaría tomando el pelo y se lo dijo

Me estas tomando el pelo
No lo hago

Paco pensó un momento y miró por la ventana delantera de su casa y vio al viejo Ryan el cojo en su intento de sacar la basura sin garrota y sin caerse, entonces le dijo

Si vives donde dices vivir ¿que ves por la ventana de tu casa?
Al viejo Ryan con su cojera y su basura apestosa

Paco se sobresaltó, apago el pc y se fue a la cama asustado.


Pasó justo una semana hasta que Paco se atrevió a jugar otra vez, cada vez que salía y entraba en casa se quedaba mirando la casa y pensaba que si era posible que alguien viviera en ella sin que nadie fuera capaz de enterarse.

Tras una semana de abstenerse de su momento preferido, decidió volver a jugar y así podría averiguar algo más de este misterio. Cuando enchufó su computadora vió a su amigo conectado y en cuestión de milésimas este le habló enfadado y le preguntó:

¿Que has hecho esta semana? Te he estado esperando para jugar y no aparecías.
He estado ocupado, pero ya estoy libre.

Paco respiro profundamente y le preguntó.
 
¿Puedes quedar? Me gustaría conocerte
Claro vente ahora a mi casa
¿Ahora?
Claro, vente lo pasaremos bien
Vale, me pongo las zapatillas y voy.

Después de esta conversación Paco pensó que era un estúpido, ¿Por qué decirle de quedar? ¿Y si era una broma de alguien?  Pero a lo hecho pecho, se puso las zapatillas y salió de su casa.

Nada mas salir pensó que no podía ser verdad, que no podía vivir nadie en ese lugar.
Se acerco a la puerta y busco el timbre, cuando lo encontró le dio miedo tocarlo ya que a saber como sonaría un timbre en una casa así, pero lo tocó. El ruido fue muy bajo y bastante defectuoso, esperó y esperó pero nadie fue a abrir entonces toco a la puerta y al segundo golpe se dio cuenta que estaba abierta, trago saliva y entró.

Una vez dentro ocurrió lo inimaginable, todo era maravilloso era una casa preciosa, llena de fotos familiares y de lámparas que alumbraban muchísimo pero de una forma la mar de cálida, la casa olía a recuerdos alegres, a momentos de felicidad,  sonaba una música muy relajante y aún a pesar de ser idéntica en construcción a la de Paco parecía mucho mas grande y acogedora.

Se desvaneció todo miedo de su mente y afloró enormemente su curiosidad sobre su amigo, así que dando un primer paso dentro de la casa en una enorme alfombra, se aventuro a buscarlo mientras observaba todo con gran admiración.

Buscó en el primer piso pero no encontró a nadie, solo se maravilló aun más, viendo la cocina y el salón, por mirar miró hasta en el aseo, así que decidió mirar en las habitaciones de la segunda planta.

Las segunda planta aparentaba tan acogedora como la primera o más si eso era posible, entonces escuchó a una persona llamarlo desde la habitación del fondo y fue hacia ella, una vez en la puerta y antes de abrirla, le recorrió un escalofrío intenso que le recordó lo extraño que era todo aquello, pero no iba a echarse hacia atrás en este momento tan crucial. Abrió la puerta y lo vio, el se presentó de una manera muy amable.

 Se llamaba Johan, era una persona agradable a la vista, bien vestido y con una mirada muy especial como la de un bebé, al entrar, además, se percató de lo grande que era su cuarto y la hermosa distribución del mismo, en el fondo junto a la ventana extrañamente no tapiada, estaba el escritorio con su ordenador.

Johan le invitó a sentase y le trajo una bebida caliente que aceptó con gran placer.
Estuvieron hablando largo rato y por fin, y tras un rato de parloteo, en él  vió a su alma gemela, a una persona que lo entendía completamente, al gran amigo que andaba buscando.

Se hizo muy tarde y Paco abandonó la casa con la gustosa promesa de volver todas las noches. Una vez fuera y de camino a la su hogar, volvió la mirada y ahí estaba, la casa misteriosa de ventanas tapiadas y aspecto ruinoso, pero su sentimiento había cambiado y no le transmitía lo mismo, pues dentro se encontraba su mejor amigo y le daba igual lo inexplicable del asunto.

Día tras día paco iba a la hora acordada a casa de Johan, pasó a ser su momento preferido del día. Cuanto más lo conocía mas lo admiraba, su forma de ser, de hablar, de moverse. Lo que más le fascinaba eran todos los deseos que tenía para su vida.

Nunca contaba nada de sus padres, lo único que logró sacar en claro es que sus padres lo dejaron cuando el era muy pequeño y después se divorciaron, no le supo decir por qué, pero de vez en cuando volvían a visitarlo y eso le alegraba mucho. En la casa no vivía solo, en la habitación contigua a el vivía su abuela una persona encantadora y cariñosa que el la trataba como si fuera su madre ya que prácticamente le había criado ella.
Los ratos en casa de Johan pasaban volando y muchas noches se entristecía que se terminaran y ambos opinaban igual.

Tan era la admiración que tenía por el y su manera de ser, que lo tomó como ejemplo de comportamiento, Paco empezó a  mostrarse a los demás con la simpatía y comprensión que demostraba su amigo y la gente empezó a mirarlo con otros ojos, otros chicos se hicieron amigos de el y sus padres se alegraron mucho por su cambio.

Un día  en una de sus reuniones nocturnas Johan le dijo:

Amigo Paco, mañana es mi cumpleaños y me alegraría mucho que te quedaras a dormir.

A lo que Paco contestó:

Claro amigo lo haré encantado
¡Maravilloso! Jugaremos al ordenador, mi abuela nos hará una buena cena y podremos charlar todo el rato que queramos.

Muy alegrado por la noticia del cumpleaños, Paco se fue a casa y se acostó pronto para que pasara el tiempo, pasara más rápido hasta el momento del cumpleaños.

Al día siguiente, se levantó muy enérgico y contento, en el desayuno, le dijo a sus padres que se quedaría a dormir en casa de su mejor amigo, a lo que sus padres emocionados le contestaron que perfecto. El resto del día se lo guardó para pasarlo en el centro comercial buscando el regalo perfecto para su mejor y más maravilloso amigo. Anduvo y anduvo hasta que al final lo vió, un maravilloso juego que el quería desde hace tiempo, pero nunca se compró por lo caro que era, pero aquel era su mejor amigo y quería ver la cara que ponía cuando lo viera.

Una vez adquirido el regalo, volvió a su casa, lo envolvió y descansó hasta la noche.
Cuando el sol por fin se escondió Paco cargó su saco de dormir en la espalda, cogió el regalo y marcho al cumpleaños con gran entusiasmo. Cuando abrió la puerta de la casa de Johan, todo era maravilloso, montones de globos y regalos, su abuela le dijo que pasará al comedor donde se encontraba Johan sentado esperándole. En el momento que vió a Paco se levantó y le dió la bienvenida como era de costumbre, pero esta vez de una manera más ferviente. Y le dijo que se sentara.

Una vez tomado asiento, Paco sacó el regalo de debajo de la camisera y se lo entregó.

¡OOOO! muchas gracias, pero no hacia falta ningún regalo, que te quedes esta noche a dormir lo considero el autentico regalo
jajaja a veces eres un poco cursi, ábrelo anda

Acto seguido lo abrió, y Paco miró expectante su cara, pero el no hizo ningún
movimiento de sorpresa ni de alegría. Paco se asusto, pensó que de alguna manera había metido la pata, pero el lo tranquilizó y le dijo:

Perdona que mi reacción no haya sido la que esperabas pero  que sepas que me a
gustado mucho, ¡ venga a cenar!

La cena fue maravillosa, todo estaba muy delicioso y la tarta era espectacular.
Justo antes de que soplara las velas Paco le dijo que pidiera un deseo, el se quedó un buen rato mirando a Paco, tanto que este se sintió un poco intimidado, acto seguido sopló las velas y se zamparon la tarta.

Después de aquella gran cena subieron a su cuarto y comenzó la gran noche. Jugaron al pc y a juegos de mesa y después de todo aquello hablaron y hablaron hasta que su abuela les dijo que se acostaran, que ya era tarde.
Johan se metió en su cama y Paco en su saco, justo antes de apagar la luz el le dijo

Sabes, he estado esperando esta noche mucho tiempo.

A lo que Paco contestó
    
Yo también amigo Mio yo también .

Johan apagó la luz y se durmieron, Paco pensó que maravilloso era estar ahí con su amigo y se quedó durmiendo con un gran sentimiento de alegría.

El día siguiente llego, se hizo tarde, Paco se despertó, miró la hora, eran las 11, entonces giro la cara para decirle a su amigo que ya era hora de levantarse, y para su sorpresa allí no había nadie. Se levantó y cuando iba a vestirse se dio cuenta de que no estaba su ropa, así que cogió una manta se la puso por encima y salio fuera de la habitación. Lo buscó por toda la casa pero no lo llamó a voces pues no quería despertar a su abuela.

Pensó ¿que clase de broma era esa? y decidió volver a su cuarto. Una vez en la puerta, escuchó algo parecido a su misma voz fuera de la casa, abrió la puerta de la habitación y
de repente una sensación terrible de miedo recorrió su columna hasta llegar casi a consumirle, en la habitación no había nada todo estaba negro, como si allí hubiera habido un incendio o algo parecido, aun así se asomo a la ventana la cual estaba casi toda tapiada y allí estaba, de manera inexplicable una persona idéntica a el con sus padres en la parte delantera de su casa, hablando y riendo, Paco sorprendido y sin ninguna explicación miró a su clon intentando descifrar que pasaba allí, cuando de repente este miro a la ventana y se quedaron ambos mirándose a los ojos un instante, entonces en ese instante lo vió claro en aquellos ojos, la mirada tierna y amable de bebe que tenia su amigo, este de repente cogió de la mano a su madre y marcharon al interior de la casa de Paco.

El pánico se apoderó de Paco y salió corriendo fuera de la habitación camino a la puerta principal de la casa, por el camino vio la casa distinta oscura y mas pequeña, el pánico aumentaba cuanto mas miraba a esas paredes negras y escaleras casi rotas. Una vez llegó a la puerta la intentó abrir pero no podía, empezó a golpearla, paranoicamente, comenzó a chillar y a golpearla al mismo tiempo, de repente se percato de que sus manos eran distintas y fue corriendo al aseo.

Una vez llegado a el observó que este era distinto, era oscuro y siniestro y las paredes también estaban quemadas, pero un espejo permaneció intacto. Tragó saliva y se dispuso a ver su reflejo, en ese instante lo entendió todo y se hecho a llorar desconsoladamente cuando una imagen oscura apareció en la puerta del aseo una señora mayor con el pelo blanco, la cara agrietada y pálida. Hubo un silencio aterrador y de repente ella dijo con una voz rota:

                 -Era lo mejor para mi Johan

Se acercó, le tocó el hombro, lo miró fijamente a través del espejo con esos ojos blancos y tan cambiados y le dijo:
                
Lo siento mucho muchacho, ahora yo cuidaré de ti para siempre.


Cuando finalizó el curso, la familia de Paco decidió mudarse a Nueva York por motivos que se desconocen.

Años después una pareja fue a ver la casa con un agente inmobiliario, ellos la veían barata a pesar de que necesitaría reformas pero decidieron no comprarla, aun así sintieron curiosidad y le preguntaron por el motivo de su precio tan bajo, a lo que agente inmobiliario contestó.

Ya que no la váis a comprar os lo puedo decir, el motivo de este precio es               que aquí hubo una tragedia familiar, hace bastante tiempo aquí vivía una familia, padre, madre, bebé y abuela. Un martes por la mañana y con los padres fuera trabajando, de manera inesperada se originó un fuego en la casa, empezó por la cocina, los bomberos dicen que por una pequeña fuga de gas y un chispazo de la nevera comenzó el incendio, después el fuego se extendió por toda la casa, en ese mismo instante la abuela le estaba dando el biberón al bebe dijeron los bomberos. No sobrevivieron. Unos meses después los padres se separaron, no podían aguantar el dolor que solo al estar juntos recordaban. La gente dice que pudieron oír gritos de la abuela  diciendo, - salvar a mi nieto- pero no pudieron hacer nada.

Momentos después de escuchar la historia se marcharon apenados de la casa y está siguió deshabitada muchos años.

Ha informado: Chamaco Loco